Cambio climático
La ganadería industrial intensifica el cambio climático al generar un gran volumen de gases de efecto invernadero.
Ya sabemos que el cambio climático provocado por el hombre es real y que representa una gran amenaza para el planeta y sus habitantes. Los datos actuales sugieren que debemos reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en los países desarrollados en al menos un 80% para 2050 si queremos evitar un aumento de temperatura promedio de más de 2ºC1. La ganadería industrial es un factor importante que contribuye al desafío del cambio climático, ya que libera grandes volúmenes de estos gases.
Una gran variedad de fuentes de dióxido de carbono
La ganadería industrial produce gases de efecto invernadero a lo largo de toda su "cadena de suministro". Por ejemplo, la tala de bosques para cultivar y criar animales reduce los ‘sumideros’ de carbono vitales y libera gases previamente almacenados en el suelo y la vegetación.
Una indústria hambrienta de energía
La ganadería industrial también requiere grandes cantidades de energía para funcionar. Esta no se utiliza solo para criar a los animales, sino también para cultivar la gran cantidad de alimento que necesitan. Según un estudio publicado por The Royal Society2, el alimento es el consumidor de energía dominante, que utiliza alrededor del 75% de la energía total requerida. El resto es necesario para factores como la calefacción, la iluminación y la ventilación.
El dióxido de carbono no es el único problema
El problema no es solo el dióxido de carbono: gases como el metano y el óxido nitroso, que también se producen en cantidades significativas, se liberan a través de diversas fuentes, incluidos los purines y el uso de fertilizantes. La ganadería produce el 37% y el 65% de nuestras emisiones globales de metano y óxido nitroso, respectivamente3. Ambos gases son mucho más potentes que el dióxido de carbono.
El cambio climático dificultará la cría de animales
El cambio climático ya está perjudicando la producción de alimentos4 y se prevé que estos impactos aumenten con el tiempo, con efectos potencialmente devastadores. Las temperaturas más altas, por ejemplo, podrían empeorar aún más la situación en las regiones con escasez de agua y dificultar la cría de animales y el cultivo de alimentos. Según el Convenio sobre la Diversidad Biológica5 , el cambio climático puede afectar el crecimiento y la producción de las plantas ya que promueve la propagación de plagas y enfermedades, aumenta la exposición al estrés por calor y fomenta la erosión del suelo debido a los vientos más fuertes.
No lo decimos solo nostros
La carne de vacuno de las granjas industriales requiere el doble de energía de combustibles fósiles que la carne de vacuno criada con pastos.
Pimentel (2004)6
LA GANADERÍA REPRESENTA ALREDEDOR DEL 14,5% DE NUESTRAS EMISIONES GLOBALES DE GASES DE EFECTO INVERNADERO
Food and Agriculture Organization of the United Nations (FAO) (2013)7
Added heat stress, shifting monsoons, and drier soils may reduce yields by as much as a third in the tropics and subtropics, where crops are already near their maximum heat tolerance. El estrés por calor adicional, los monzones cambiantes y los suelos más secos pueden reducir los rendimineots hasta en un tercio en los trópicos y subtrópicos, donde los cultivos ya están cerca de su máxima tolerancia al calor.
United Nations Environment Programme (UNEP) (2001)8
¿Y qué hacemos?
La ganadería industrial agrava el cambio climático. Al tomar medidas contra la ganadería industrial, no solo estamos creando una revolución en la manera en que criamos animales y nos alimentamos; también estamos abordando uno de los mayores desafíos de sostenibilidad del planeta.