Mala carne, mala salud
Estudios recientes1 han demostrado que la carne de animales de granja intensiva puede tener niveles más bajos de omega-3 beneficiosos y una proporción menos favorable de omega-6 a omega-3. Una ingesta inadecuada de omega-3 y una proporción desequilibrada de omega-6 a omega-3 se han relacionado con enfermedades cardiovasculares y ciertos cánceres2. Un informe reciente de Compassion in World Farming muestra que los productos animales de granjas extensivas a menudo contienen niveles más altos de antioxidantes, hierro y niveles más bajos de grasas3. El auge de las granjas industriales y la carne "barata" también ha provocado importantes problemas de consumo excesivo en muchos países del mundo; el consumo excesivo de carne roja y procesada se ha relacionado con una serie de afecciones graves relacionadas con la salud, como la obesidad, la diabetes y el cáncer.
No lo decimos solo nosotros
Un consumo eleveado de carne roja puede aumentar el riesgo de desarrollar algunos tipos de cáncer en un 43%.
World Cancer Research Fund (WCRF) (2011)4