El pasado 6 de noviembre, el Gobierno de España junto a otros 44 gobiernos se comprometió a tomar medidas urgentes e invertir en la protección de la naturaleza y el cambio hacia formas de agricultura más sostenibles. Sin embargo, el compromiso no menciona en absoluto la necesidad de reducir el consumo de carne.
Profundamente decepcionante
Acogemos con satisfacción el hecho de que los gobiernos estén tomando por fin algunas medidas para abordar la cuestión de la agricultura y su impacto en el clima tras semanas de presión por parte de Compassion y otras ONG. Sin embargo, estamos profundamente decepcionados por el hecho de que la cuestión vital de la reducción del consumo de carne haya sido completamente ignorada y que la carne no haya sido mencionada en absoluto en este documento de 2 300 palabras sobre alimentación y agricultura sostenibles.
En respuesta al compromiso, hemos emitido una declaración en la que instamos a los líderes mundiales a abordar la cuestión del impacto de la alimentación y la ganadería en el cambio climático.
Esta noticia llega apenas un día después del lanzamiento de nuestro último informe, “Breaking the Taboo: Why Diets Must Change to Tackle Climate Emergency” ("Rompiendo el tabú: por qué las dietas deben cambiar para hacer frente a la emergencia climática"), que expone los claros argumentos científicos que avalan que, sin una reducción drástica del consumo de carne y lácteos, no podremos cumplir los objetivos climáticos del Acuerdo de París.
Un reto que debemos abordar de frente
Peter Stevenson, nuestro asesor jefe de política y autor del informe, afirma:
"Después de semanas de presión sobre los distintos gobiernos, es un alivio ver que 45 de ellos han hecho una declaración pública en la que reconocen que una cuarta parte de los gases de efecto invernadero (GEI) provienen de la agricultura, la silvicultura y otros usos del suelo.
"Sin embargo, el anuncio ignora por completo que la parte masiva de estos GEI -más de la mitad- provienen de la ganadería, y en su lugar ofrece vagos compromisos sobre posibles enfoques técnicos como los "cultivos resistentes al clima". No debería ser posible redactar 2 300 palabras sobre la alimentación y la agricultura sostenibles sin mencionar ni una sola vez la carne; sin embargo, este acuerdo se las arregla para hacer precisamente eso.
"La realidad es que sólo la ganadería mundial produce más gases de efecto invernadero que las emisiones directas de los aviones, trenes y coches del mundo juntos, y no sólo directamente, sino por la tala de bosques para cultivar alimentos para las granjas industriales de los países desarrollados.
"En un mundo que produce 80 000 millones de animales terrestres al año para la alimentación, la mayoría de ellos criados en granjas industriales, restablecer el equilibrio requerirá cambiar a una producción respetuosa con el bienestar y la naturaleza con menos animales.
"No tiene ningún sentido comprometerse a preservar los bosques por un lado y perpetuar el modelo de ganadería industrial que impulsa la deforestación por otro. Los gobiernos ya no pueden permitirse eludir los poderosos intereses creados que impulsan la expansión de las granjas industriales y el consumo excesivo de carne y productos lácteos asociado. Necesitamos actuar para reducir el consumo de carne y lácteos, y lo necesitamos ahora, antes de que sea demasiado tarde".
Lee el informe “Breaking the Taboo: Why Diets Must Change to Tackle Climate Emergency” aquí.