Por unas fiestas compasivas

El actual sistema alimentario influye en el cambio climático no es una novedad, la buena noticia es que que con unos pequeños cambios se puede seguir disfrutando de los banquetes navideños de un modo empático.

Algunos de los alimentos más populares en esta época del año son también factores determinantes del cambio climático. Por ello, consumir menos alimentos de origen animal, eligiendo aquellos procedentes de sistemas más respetuosos con su bienestar, o cambiarlos totalmente por alternativas vegetales, es el mejor regalo para los animales y el planeta. 

Un sistema cruel e insostenible

A nivel mundial, el sector ganadero emite más gases de efecto invernadero (GEI) que todos los aviones, trenes y coches del mundo juntos.

Cada año, miles de millones de animales sufren en condiciones de sobreexplotación y hacinamiento en las granjas intensivas, encerrados en jaulas, sin ver la luz del sol ni pisar el pasto. Además, las granjas intensivas son una fuente importante de contaminación del suelo y el agua. 

 Por ejemplo, la piscifactoría puede emitir más del doble de GEI (por cada 100 g de proteína) que las alternativas vegetales al pescado. Asimismo, la producción de queso puede emitir unas cinco veces más GEI que el tofu; mientras que la leche de vaca puede emitir tres veces más que su alternativa vegetal.

Pequeños gestos, grandes beneficiados

Para unas fiestas más respetuosas con los animales y el planeta, puedes seguir estos sencillos consejos:

• Busca alternativas vegetales a la carne: considera la posibilidad de probar una opción a base de plantas, como tofu o seitán (que además se puede hacer en casa)... Si eliges carne de origen animal, intenta que sea del mejor local, sostenible y de alto bienestar, como la procedente de ganadería ecológica.
• Evita el consumo de pescados de piscifactoría como el salmón o el besugo. En su lugar, opta por alternativas vegetales o elige una ración mucho más pequeña de pescado salvaje. 
• Escoge productos lácteos más respetuosos con los animales, como aquellos procedentes de sistemas ecológicos o de cría al aire libre; o piensa en cambiarlos por cremas, leches, o quesos vegetales, que pueden ser igual de tentadores.
• Elige huevos de granjas libres de jaulas. Ten en cuenta que la etiqueta especifique su procedencia: 0 y 1 son los que garantizan un mayor bienestar animal.

Del Recetario CIWF: Wellington de hongos

-Una unidad de masa hojaldrada vegetal

-Cantidad necesaria de champiñones

-1 cebolla dorada

-2 dientes de ajo

-2 cucharadas de margarina o aceite

-Sal y pimienta al gusto

-1 cucharada de bebida vegetal

-Hierbas frescas (romero, tomillo)

Procedimiento:

Precalienta el horno a 200°C.

Pica la cebolla y el ajo. Sofríelos en la margarina o el aceite, luego añade los champiñones cortados en mitades, cocínalos hasta que estén tiernos y hayan soltado todo su jugo. Sazona con sal, pimienta y hierbas frescas. (Para una versión elevada, puedes sumar otros ingredientes como castañas, vegetales o frutos secos).

Estira el hojaldre sobre una bandeja antiadherente, coloca el relleno en el medio dejando un espacio alrededor, y. dobla la masa sobre este, luego séllala con un tenedor. Pincela el Wellington con bebida vegetal y haz unos cortes en la parte superior para que salga el vapor.

Hornea en la parte inferior del horno por unos 40 minutos, o hasta que el pastel esté dorado y crujiente.

Para acompañar:

Patatas asadas con romero: Un clásico que combina a la perfección.

Puré de patatas: Cremoso y reconfortante.

Verduras al horno: Una opción más ligera y saludable.

Puré de boniato: el dulzor le otorgará un toque especial.